¿CÓMO PUEDEN LOS PEQUEÑOS TRANSPORTISTAS SOBREVIVIR A UNA PANDEMIA?
En el mercado de servicios de transporte de bienes o personas, una gran parte, alrededor del 60%, está conformada por pequeñas empresas, que resultaron ser las más vulnerables durante la epidemia del coronavirus. Una parte de los pequeños transportistas de carga perdió sus pedidos y están al borde de la ruina, mientras que la otra parte, por el contrario, no es capaz físicamente de hacerle frente al brusco aumento de la demanda de los servicios de transporte.
Los problemas de ambas partes podrían ser resueltos por los sistemas de monitoreo del transporte que permiten planificar las rutas y acortar los tiempos de entrega. Sin embargo, también se requerirán determinadas inversiones. Para 5-10 vehículos (que representan el 60% de las compañías en el mercado que cuentan precisamente con una flota con esta cantidad de vehículos), los gastos diarios promedio por unidad son de aproximadamente $8,400.00 pesos. Al mismo tiempo, los costos en concepto de compra de combustible representan hasta el 40% de su presupuesto.
No obstante lo anterior, hay por lo menos 4 formas de ahorrar hasta un 20% en el combustible; de reducir los costos asociados a la reparación y ahorrar tiempos.
En resumen, se debe aumentar dos veces la rentabilidad del transporte de carga mediante el empleo de la telemática.
1. Reducir el fraude con el combustible
Según las estadísticas, las empresas pierden del 15 al 40% del combustible debido al huachicoleo (robo mediante extracción ilícita). Hay bastantes oportunidades para cometer fraude: sin un control, los conductores pueden robar entre 20-50 litros por día y, en conspiración con los operadores de las estaciones de servicio, hasta 100 litros diarios. Para una compañía con una flota de 5-10 vehículos, si tomamos en cuenta tan solo un 10% de robo de combustible, las pérdidas se van por encima de los $ 25,000 pesos mensuales por cada vehículo que se multiplica por el número real de unidades que tienen trabajando. Con el crecimiento de la flota, aumentan los gastos relacionados con la compra de combustible y, en consecuencia, de las pérdidas en dinero contable real.
El segundo factor es la carga insuficiente de combustible en las estaciones de servicio. De acuerdo con las estadísticas, como mínimo en cada tercera estación de servicio los conductores pagan hasta un 5%1 de más debido a la manipulación en la venta de combustible que redunda en una menor cantidad de combustible por carga.
[1]. En la actualidad, un litro de combustible diesel puede costar de promedio $ 18.00 pesos el litro; al mes son $ 252,000.00 pesos por vehículo (si se consumen 14,000 litros). Es decir, al año la empresa pierde en promedio casi $ 302,400.00 pesos a causa del robo de combustible y en promedio $12,600.00 pesos mensuales por el cargado insuficiente por cada vehículo en cada estación.
El problema puede resolverse con la ayuda de sensores de consumo del combustible y con una adecuada elección de las estaciones de servicio. La extracción y el cargado insuficiente se registran utilizando sensores del nivel de combustible instalados en el tanque de combustible del vehículo, y la plataforma de monitoreo del vehículo registra el consumo de combustible y el grado de cargado insuficiente en cada estación de servicio. Como resultado, se pueden recopilar las estadísticas durante una semana o un mes sobre el consumo de combustible de cada vehículo y crear su propia clasificación o el rating de las estaciones de servicio, que los automóviles de la empresa utilizan con mayor frecuencia. Pero esta opción solo funciona para el nivel básico de control de combustible. El error de los sensores estándar alcanza el 3% debido al cambio en las características técnicas del combustible en las estaciones de servicio. ¿La solución? Los sensores de nivel de combustible con función de autoajuste que tienen en cuenta la diferencia entre los tipos de combustible y cuentan con una mayor precisión – de hasta el 99,5% - determinan el nivel de combustible en el tanque al cargar en las estaciones de servicio y el consumo durante la ruta.
2. Elevar la calidad de conducción
Con la ayuda de la telemática, se puede controlar no solo el consumo de combustible, sino también otros parámetros y métricas importantes: el cumplimiento y respeto del reglamento del tránsito (si el conductor excede la velocidad máxima permitida), los frenazos bruscos y los acelerones, el cuidado al conducir fuera de las carreteras. Si se controla la disciplina de la conducción, los choferes comenzarán a conducir el vehículo de una manera más segura y precisa. Durante la conducción moderada del automóvil, el consumo de combustible es un 20% menor, y esta diferencia también es fácil de rastrear utilizando los sensores del nivel de combustible con la función de ajuste automático. Además, al acelerar en el lugar y al frenar bruscamente, se desgastan más rápidamente los componentes importantes tales como el motor, el embrague, las llantas y los frenos. Un ahorro adicional – de hasta un 5% – se logra disminuyendo el funcionamiento del motor en punto muerto. Al implementar la práctica de la comunicación efectiva, se reduce el riesgo de accidentes de diversos niveles de gravedad, disminuye el número de multas por violación del reglamento del tránsito. La compañía no solo reduce el consumo de combustible en un 8-10%, sino también el número de reparaciones, en un 25%. Y si ha logrado reducir el número de reparaciones, las paradas del vehículo serán menores. El kilometraje mensual y, por lo tanto, los ingresos por vehículo aumentarán.
3. Reducir el tiempo de carga de combustible
En la mayoría de los casos, los conductores no cargan el tanque lleno de combustible, siguiendo las instrucciones de las compañías que, de esa forma tratan de evitar una desgracia común: el huachicoleo de combustible o el robo de dinero de los vales de combustible. La parada en la estación de servicio tarda un promedio de 30 minutos, no importando si el conductor llena el tanque completo o solo la mitad. El kilometraje promedio de un vehículo en el mercado es de 35,000 km al mes, y el consumo promedio de combustible es de aproximadamente unos 2.5 kms por litro. Por lo tanto, se consumen en promedio si el vehículo es usado de forma adecuada y normal 14,000 litros de combustible al mes. Si carga el tanque lleno de combustible cada vez, se necesitarán unas 40 cargas de combustible (en el mercado la mayoría de los automóviles tienen un tanque de combustible con una capacidad de 350 l), si es la mitad – serían el doble de las veces. En consecuencia, el aumento del tiempo de paradas se multiplica. Es decir, usted puede pasar 40 horas al mes en una estación de servicio,o 25 horas o solo 8.5. Eso significa que, con un costo promedio de las transportaciones de $60/km y a una velocidad promedio de los vehículos sin paradas de 70 km/h una hora de parada le costará a la empresa $1200 por cada vehículo. Si cargas el tanque lleno cada vez el kilometraje adicional de cada vehículo aumentará en unos 595 km, y los ingresos por vehículo – casi en $5600 al mes.
4. Implementar el video monitoreo en los medios de transporte
El video monitoreo resuelve problemas tales como: mejoramiento de la calidad de la conducción, contención de los intentos de conducción insegura (por ejemplo, usar el teléfono mientras se conduce o durante las maniobras peligrosas). La empresa puede aumentar la eficiencia de la flota, refutar reclamos relacionados con la calidad de la carga transportada y, como resultado - reducir los costos y evitar gastos imprevistos.
De ese modo, las inversiones en telemática permiten erigir un sistema transparente de gestión de la flota de vehículos basado en indicadores medibles y obtener rápidamente los resultados. Por ejemplo, el consumo de combustible se puede reducir al menos en un 20%, liberando así un 5% de los recursos de los costos totales y duplicar las ganancias de la empresa.
[1] Según los datos de los estudios de OMNICOMM de la base de los Medios de Transporte (MT) conectados a la plataforma de monitoreo del transporte Omnicomm Online, año 2019.
Julio 30, 2020